Se trata de Don Bernardino Pantoja, un hombre que era muy apreciado por la comunidad selk’nam. Su partida física se produjo este viernes, y en las redes sociales lo recordaron con aprecio como un personaje muy querido.
La comunidad fueguina y selk’nam manifestó su pesar y despedida tras producirse la partida física de Bernardino Pantoja Imperial, este viernes 26 de junio.
Además de antiguo poblador, Don Bernardino era miembro de la Comunidad Indígena Rafaela Ishton y sel’knam de Río Grande, y Club Deportivo y Cultural Gral. San Martín.
« Hoy es un día muy sentido para toda nuestra comunidad selk’nam, el abuelito Bernardino Pantoja Imperial, deja nuestro plano para unirse al gran kashpek », manifestaron por las redes sociales tras conocerse la noticia.
« Hoy nos dejó físicamente un antiguo poblador y gran deportista, Bernardino Pantoja Imperial Q.E.PD. apodado el « Rey de la gambeta ». Quienes lo recuerdan de joven lo tienen por un gran deportista, en el fùtbol, en el boxeo. Acompañamos a todos los que suman su silencio, a su silencio… », añadieron.
« No tengo palabras para agradecer tanto amor, bondad, hospitalidad, sus enseñanzas y conversaciones de nuestro pueblo y sus antepasados », expresaron.
La estudiante e investigadora francesa, Lauriane Lemasson, detalló las actividades que realizaron tres integrantes de los pueblos selk´nam y yagan en Paris y otras ciudades europeas. Destacó la recepción que tuvieron y la posibilidad de “acercarse al lugar del otro, para no cometer las cosas inaceptables que se hicieron, en parte de los siglos IXX y XX, en antropología”. Remarcó que sobre los pueblos originarios “el único poder que tienen los colonialistas es haber impuesto la vergüenza por la propia identidad, pero hoy esa vergüenza se convirtió en orgullo”, aseveró.
“Presenté mi trabajo durante un coloquio internacional en París, eso fue en enero de 2019, y encontré a Denis Laborde que es el organizador del Festival Haizebegi. Él seguía mis investigaciones, que comenzaron en 2011, y cuando llegó al coloquio me preguntó sobre mis trabajos”, comenzó relatando Lauriane Lemasson, investigadora francesa que realiza sus estudios en La Sorbona, elaborando su tesis sobre “Paisaje sonoro como recurso cultural, al sur del Hatitelén (Estrecho de Magallanes)”, para la cual viaja a la Patagonia chileno-argentina recurrentemente y mantiene un contacto frecuente con integrantes de pueblos originarios.
Lemasson dijo que después de la charla, Haizebegi le manifestó que tenía “carta blanca” para presentarse en el festival que se realizó el pasado mes de octubre en Bayona – Francia, con el antecedente de una entrevista que había realizado en Punta Arenas con Mirtha Salamanca, nieta de Lola Kiepja, la cual fue traducida en distintos idiomas aunque siempre “con aviso previo a la propia Mirtha, para saber si contaba con su acuerdo”, aclaró la investigadora francesa.
Luego de escuchar la entrevista, Laborde propuso invitar a Mirtha Salamanca al festival y manifestó que “se podrían invitar a dos personas más, quizás tres si contábamos con la subvención”, mencionó Lauriane Lemasson, advirtiendo que la fundación que encabeza Denis Laborde se sostiene con mucho esfuerzo, con aportes propios o de colaboradores “pero sin financiamiento directo del estado”, remarcó.
Dijo que se trata de una fundación que “trabaja mucho con los inmigrantes, con cuestiones sociales y apoya muchas causas humanitarias”. Con ese objetivo se planteó la importancia de referirse a la situación de los pueblos originarios de la zona invitando -en consulta con Mirtha Salamanca- a Víctor Vargas Filgueira y José González Calderón, ambos pertenecientes al pueblo yagán.
Lauriane Lemasson aclaró que todo el material que se presentó, como así también el contenido de las charlas y las conferencias fue resuelto por Salamanca, Vargas Filgueira y González Calderón. “De ellos surgían la iniciativas, porque la idea era que definieran lo que querían compartir con la gente en Francia”, señaló.
Dijo que pudieron hablar “de una variedad de temas importantes como las salmoneras, el respeto de su cultura por parte de artistas e investigadores, la importancia de dar una devolución a los pueblos cuando se realiza algún trabajo para que no se pierda”. La investigadora francesa comentó que luego los integrantes de los pueblos originarios pudieron intercambiar y compartir con referentes locales, y en esos contactos se dieron cuenta que también en Francia había pueblos originarios “entre ellos los de mis antepasados”, destacó Lauriane Lemasson, mencionando que desciende de bretones.
Otro contacto importante fue con Pascal Blanchard, quien investiga sobre los llamados “zoológicos humanos”, y con quien pudieron “darse cuenta que no había solamente shelk´nam y yaganes exhibidos, sino que también había integrantes de pueblos europeos y de otras partes del mundo, para mí también fue importante porque descubrí que había gente de mi pueblo también exhibida allí”, expresó.
La investigadora francesa indicó que fue con los zoológicos humanos que “nació el racismo, porque de esa época viene. Antes había desconocimiento del otro, pero no esa jerarquía entre la gente. Con la época de los zoológicos humanos nació el racismo y fue apoyado por los antropólogos y científicos de ese tiempo, en un intento por comprender como había sido la evolución humana”.
Contó que también tuvieron “acceso a los archivos de (la antropóloga franco-norteamericana Anne) Chapman, dónde fue muy emocionante ver que podían tener contacto directo con ese material. También mantuvieron contacto con el responsable de las Relaciones Exteriores de la Conferencia de los Presidentes de las Universidades Francesas, Jean Luc Nahel, con quien se planteó la posibilidad de algunos proyectos a futuro”.
La actividad tuvo, como otro punto fuerte, una charla para estudiantes franceses quienes se vieron visiblemente emocionados por los testimonios, en especial el de Mirtha Salamanca y el relato de la historia de su abuela Lola Kiepja. Como conclusión los estudiantes, por iniciativa propia, resolvieron elevar una nota con su firma para apoyar el reclamo de restitución de los restos y “pedir una respuesta”.
Lauriane Lemasson indicó, por último, que quedó en claro en el viaje que el investigador debe “acercarse al lugar del otro, para no cometer las cosas inaceptables que se hicieron en parte de los siglos IXX y XX en antropología. También fue muy importante saber que la gente se está acercando para preguntar cuando se van a repetir los talleres que se hicieron, como el de cestería, reflejando lo significativo de la relación que se estableció y como conclusión saber que el único poder que tienen los colonialistas es haber impuesto a los pueblos la vergüenza por la propia identidad, pero hoy esa vergüenza se convirtió en orgullo”, remarcó la investigadora francesa.
Mirtha Salamanca fue parte de una delegación de integrantes de los pueblos shelknam y yagán, que viajó a Francia para realizar distintas actividades. Relató las conferencias y los encuentros de los cuales participaron y destacó la importancia de “recuperar lo nuestro”. También expresó una mirada crítica sobre el trabajo de Anne Chapman con su bisabuela, Lola Kiepja.
“La invitación en lo personal fue por el linaje de Lola Kiepja, mi bisabuela. Fui con dos hermanos del pueblo yagán, Víctor Vargas de Ushuaia y José González Calderón de Puerto Williams, y estuvimos cerca de 20 días que fueron muy intensos. Participamos del festival al cual nos invitaron que se viene organizando hace ya seis años, donde hay música y se tratan temas diferentes”, relató Mirtha Salamanca, miembro del pueblo shelknam.
En declaraciones al programa radial “Desde las Bases”, contó que “en este caso, la temática era los pueblos originarios. La gran sorpresa, para quienes concurrieron, fue que había shelknam y yaganes, porque la versión que se instaló fue que ya no había más. A partir de ahí fue la invitación, hubo autoridades muy importantes, recorrimos museos, fue un precedente muy importante y vamos a seguir porque hay mucho para hacer”, expresó Salamanca.
Después mencionó que “el nexo lo hizo Lauriane Lemasson, a quien yo encontré en Punta Arenas por un invitación que me había hecho la universidad y entonces la conocí. Fue una gran sorpresa, ella está haciendo un trabajo magnífico en lo que tiene que ver con la toponimia de la Isla, con los sonidos de la naturaleza, y ese trabajo también se expuso durante estos días”, destacó la integrante del pueblo shelknam.
Anticipando que la científica francesa “está próxima a volver para esta zona, así que vamos a seguir trabajando. Es muy valeroso, porque sirve para recuperar lo nuestro. En Francia estuvimos en contacto con los alumnos de las universidades, pudimos ver el archivo de Anne Chapman. Yo pude conocer algunas crónicas, es algo con lo que hay que trabajar muchísimo tenemos que aprovechar esta oportunidad”, señaló Mirtha Salamanca.
Luego comentó que también estuvieron “dando charlas en una universidad de España, tomamos contacto con el director del museo de Berlin. Realmente fue una actividad que nos dejó mucho y pudimos hacer un pedido respecto de la devolución de los restos que están en esos museos”, confirmó.
Críticas para Anne Chapman
En ese mismo sentido mencionó que durante las charlas se refirieron “a lo que fue el zoológico humano, porque fue una clara muestra de racismo. Sabemos lo que ocurrió con nuestro pueblo y pudimos exponerlo allí”, remarcó. Después, sobre el trabajo de Anne Chapman, lo cuestionó y manifestó: “siempre digo que la opinión mía, como familiar, es de disconformidad por lo que se hizo con mi abuela”.
“Muchos dicen que sirvió para dejar en resguardo algo de mi abuela, pero yo hubiera preferido que no hubiera dejado nada. Porque sabemos que los cantos chamánicos eran privados, no podía quedar ese registro y aparte se le dio un mal uso. Realmente para nosotros, como familia, es algo muy triste. Considero que Anne Chapman vino con todo el aparato, con todo pago, mi madre por ejemplo no la quiso tender porque no nos respetaban”, relató la bisnieta de Lola Kiepja.
Dijo que cuando se presentaron ante la antropóloga franco –estadounidense “nos respondió que no nos iba a atender, porque ella con “los puros” había trabajado. Desconociendo nuestro linaje y nuestra pertenencia, la gente no sabe que atrás de esos registros hay una historia muy cruel. Llegó a decir que Lola había tenido “12 hijos seis puros y seis impuros”, ¿qué es lo que significa eso? No tuvo respeto por la familia”, insistió Salamanca.
Un pueblo ultrajado y la necesidad de recuperar la historia
Durante la entrevista expresó “sabemos que nuestro pueblo fue ultrajado, violado, entonces hay que tener un poco de respeto por esa historia. Nosotros somos un pueblo que sigue en silencio, pero estamos luchando, trabajando. Descubrimos un documental en el cual aparecían imágenes nuestras que no sabíamos que existían. Tomadas sin ninguna autorización, tenemos mucho por rescatar, mucho por trabajar”, advirtió.
Indicó que “se puede hacer algo diferente, yo siempre digo que tenemos un Estado ausente. Tenemos un ente controlador que es el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas, pero primero hay que decir que nosotros no somos un asunto. Parece que tuviéramos que estar a merced de ellos, nosotros tenemos nuestras leyes que se deben hacer respetar”, reclamó.
Mirtha Salamanca manifestó que a veces “es muy lamentable, nosotros creemos que en las escuelas siempre se tiene que decir la verdad. Por eso yo voy y digo que estamos vivos, creo que hay que contar lo que pasó con nuestro pueblo, con la mal llamada conquista que fue en realidad una invasión a nuestro pueblo y a todos los pueblos de América”.
“Porque somos un pueblo pre existente y nos sacaron todo, prácticamente nos impusieron sus leyes. Respeto el himno, la bandera, pero nos fueron impuestos. Nosotros teníamos el haruwen, nuestros grupos familiares. Se vivía libremente, en la naturaleza, en armonía, luego todo fue imposición. Hay que trabajar mucho respecto de eso, tratar de recuperar nuestra cultura y que se diga la verdad. Esa es la actividad que nos estamos planteando”, concluyó la representante del pueblo shelknam.
La jornada dará inicio el viernes 11 de octubre a partir de las 20 horas.
Organizado por la Agrupación khol Hol Naa (volver mujer en idioma selknam, se realizará una vigilia por el día de la diversidad cultural. El evento en las instalaciones de la UNTDF, ubicado en calle Thorne y Ameghino.
Desde la organización indicaron que “este evento se realiza para recordar el «EL ULTIMO DIA DE LIBERTAD DE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS «, donde se busca conmemorar la lucha de los PUEBLOS Originarios, va ser un día de mucha reflexión”, indicaron.
Asimsio, agregaron que “el objetivo es evitar q los pueblos sigan perdiendo su libertad y derechos y que se difunda que los pueblos originarios seguimos de pie en la lucha”.
Científicas sociales del CONICET comparten sus estudios culturales y vivencias en relación a las lenguas de los pueblos originarios / lenguas indígenas de Argentina
CONICET/DICYT Cancha, poncho, gaucho, morocho, carpa, vincha, pucho… una gran cantidad de palabras de nuestra habla cotidiana provienen del quechua, lengua incaica que desde hace quinientos años tiene contacto con el castellano. El quechua es una lengua originaria con gran vitalidad, en sus distintas variantes, en algunos territorios de Argentina, Bolivia, Perú, Brasil, Chile, Colombia y Ecuador. Sin embargo, esta no es la única: en Argentina hoy se hablan al menos catorce lenguas indígenas, de las treinta y cinco que se hablaban antes de la llegada de los españoles. ¿Qué se conoce sobre ellas? ¿Por qué es importante cuidarlas, valorarlas y promoverlas?
“En nuestro país, tenemos 39 pueblos indígenas –mbyá-guaraní, mocoví, pilagá, toba-qom, wichí, huarpe, entre otros–, algunos son numerosos y otros más pequeños. Según las estimaciones del último censo poblacional (INDEC, 2010), de los 40 millones de habitantes, el 2,4 % se declara indígena, es decir, más de 950 mil personas”, explican las antropólogas e investigadoras del CONICET Ana Carolina Hecht, Noelia Enriz y Mariana García Palacios.
Carolina estudia la socialización lingüística, la vitalidad y el desplazamiento de la lengua toba qom en distintos espacios (familiar doméstico, escolar) en comunidades qom urbanas de la provincia de Buenos Aires del Chaco; Noelia trabaja con comunidades mbyá-guaraní en Misiones investigando los saberes que circulan tanto dentro como fuera de la escuela intercultural bilingüe, y Mariana analiza cómo los niños de barrios qom de Buenos Aires y del Chaco construyen sus conocimientos del mundo social, especialmente los religiosos, en contextos comunitarios y escolares interculturales. Juntas participan del proyecto “Interculturalidad y educación en comunidades toba/qom y mbyá-guaraní de Argentina: una aproximación histórico-etnográfica a la diversidad étnica y lingüística en las escuelas”, que forma parte del Programa de Antropología y Educación de la Universidad de Buenos Aires.
Sus investigaciones las han llevado incluso a tener experiencias de cohabitación durante el trabajo de campo. “Yo me quedaba un tiempo con la población con la que estaba trabajando. También hacemos observación participante: formamos parte de las actividades de las comunidades”, relata Noelia. “Tratamos de desarrollar actividades que nos demandan las mismas comunidades,” –agrega Carolina– “por ejemplo, charlas y talleres en escuelas bilingües interculturales y en institutos de formación docente en donde debatimos sobre interculturalidad, niñez indígena, lenguas en contacto, diversidad y desigualdad”.
Lenguas indígenas y territorio
Según las científicas, las lenguas indígenas argentinas son las que provienen de familias lingüísticas oriundas de nuestro territorio; al mismo tiempo, también existen otras lenguas que se hablan en Argentina pero que fueron traídas por la acción migrante de países limítrofes. “Los pueblos indígenas siempre son más numerosos que las lenguas indígenas porque muchos pueblos han dejado de hablar sus propias lenguas como consecuencia de procesos históricos de invisibilización, discriminación, negación, sometimiento, entre otros factores”, señala Hecht.
En la actualidad, el abanico de situaciones es muy diverso: lenguas que ya no se hablan, otras que tienen un solo recordante, situaciones de bilingüismo, comunidades indígenas en las que predomina el español, comunidades en donde la lengua indígena se mantiene vital en el medio familiar y comunitario. “Esas situaciones pueden incluso atravesar un mismo pueblo: niños qom que hablan español como primera lengua y otros que tienen el español como segunda”, agrega Mariana.
La población mbyá es un caso muy particular. Tiene su propia lengua y habita en Misiones, en parte de Paraguay y Brasil. La lengua oral les permite a sus hablantes comunicarse en los tres países como lengua franca. Sin embargo, se escribe de manera distinta en los tres territorios. “En uno, tiene influencia del portugués; en Paraguay, del guaraní estándar, y aquí del castellano, –cuenta Noelia– por ejemplo, lo que para nosotros suena ‘ch’, en Brasil se escribe con ‘x’. Esto muestra la complejidad de la lengua indígena”.
El enorme desafío de la escuela
Todo este complejo escenario representa un gran desafío para la Educación Intercultural Bilingüe (EIB), modalidad del sistema educativo que garantiza el derecho constitucional de los pueblos indígenas. Plasmada en la Ley de Educación Nacional Nº 26.206 (capítulo XI, artículo 52), la EIB “promueve un diálogo mutuamente enriquecedor de conocimientos y valores entre los pueblos indígenas y poblaciones étnica, lingüística y culturalmente diferentes, y propicia el reconocimiento y el respeto hacia tales diferencias”.
Sin embargo, las investigadoras perciben que estas situaciones dispares y llenas de matices por las que están atravesando las lenguas indígenas no son siempre contempladas en las políticas educativas. “La legislación de la EIB está más bien orientada a niños indígenas que habitan en contextos rurales, hablan la lengua indígena y tienen muy poco contacto con el español. Mientras que la situación más generalizada en el contexto actual muestra niños indígenas en contextos urbanos, con distinto dominio de la lengua indígena”, manifiesta Carolina.
Para las científicas sociales lo ideal sería que esas legislaciones contemplasen la diversidad de realidades y matices sociales. “La educación intercultural bilingüe debería ser un desafío del que todos participemos; una forma educativa para toda la sociedad argentina y no solo para las poblaciones étnicamente marcadas; y así dar cuenta de que Argentina es un país multicultural. Además habría que pensar intervenciones en las que participen las propias comunidades, y no solo intervenciones desde afuera”.
Reconocer la historia para mirar el futuro
“El hecho de que un pueblo ya no esté hablando activamente su lengua en la actualidad, no lo hace menos indígena”, plantea Carolina quien trae a colación la dimensión histórica para analizar esta cuestión. “Ciertos procesos históricos fueron los que condicionaron las distintas situaciones que tenemos hoy en día. Si solo miramos desde el presente, vamos a tender a jerarquizar las situaciones actuales sin tener en cuenta los procesos que llevaron a que esas situaciones existan. Las vinculaciones entre lengua e identidad son siempre muy complejas, porque incluso, en la escuela, muchas personas son vistas como menos indígenas por no hablar la lengua indígena”. “La lengua es importante para la identificación de los pueblos pero, a su vez, no es el único rasgo de identificación”, añade Mariana.
Noelia se pregunta: “¿Por qué no mantener la riqueza cultural de un país? ¿Por qué negarla? ¿Por qué pedirles a las personas que sean otra cosa? La diversidad es patrimonio argentino. No hay nada que nos haga pensar que atentar contra la diversidad no sea pernicioso para la sociedad. Además, en este caso, la diversidad tiene que ver con los orígenes del espacio en donde el país se desarrolla en la actualidad y estas poblaciones son previas a los estados-nación”.
Para cuidar y proteger la diversidad lingüística, “primero tendría que haber una planificación lingüística y políticas educativas que partan de este complejo escenario actual”, sintetizan. Por eso, “sería interesante propiciar más espacios en donde se reflexionen y debatan estas cuestiones para ir desarmando ideas que están muy cristalizadas en el sentido común más generalizado” y, finamente, fortalecer la legislación en Educación Intercultural Bilingüe para que no sea solo un ideal sino que se materialice en la práctica en todo el territorio nacional.