Investigadora francesa realiza importante trabajo sobre pueblos originarios

Diario Provincia 23 (Rio Grande), 1 agosto, 2018

Una investigadora francesa se encuentra desarrollando un importante trabajo en la Isla Grande de Tierra del Fuego, para tratar de analizar “el medio ambiente sonoro de los pueblos nómadas del sur del Estrecho de Magallanes, con el recurso sonoro como recurso cultural”. Recorrió miles de kilómetros y grabó más de 50 horas de sonidos para tratar de comprender más sobre la cultura, la mitología y las vivencias de los pueblos originarios. Su trabajo fue seleccionado entre muchos otros por la Universidad de La Sorbona.

 

Lauriane Lemasson es una joven francesa, oriunda de la zona de Bretaña, que trabaja en la región para presentar su  tesis final en la Universidad de La Sorbona, basada en un  estudio multidisciplinar del medio ambiente.

Se encuentra en Río Grande, desde donde viene realizando viajes en embarcación y a pie recorriendo distintas zonas de la Isla Grande de Tierra del Fuego, tanto chilena como argentina; para recopilar datos, experiencias, sonidos y vivencias que le sirvan para realizar su trabajo, donde se combinan áreas como la etnografía, la ecología sonora y la geografía.

“Grabar el sonido de los pájaros, saber en qué momento aparecen, descubrir el eco que se produce en distintos lugares y leer la forma de las nubes”; enumera Lemasson, cuando se refiere a las múltiples tareas que viene desarrollando, como para avanzar en un estudio que le sirva para transportase hasta los tiempos en los cuales shelknam, yámanas y alakalufes poblaban la zona, en armonía con  el medio ambiente.

“Esta es mi tesis para el doctorado, porque el máster lo realice en el año 2013 con una expedición en la parte argentina. Recorriendo el lugar durante tres meses y medio con una mochila, la cámara fotográfica y un grabador. Estuve caminando a lo largo de 2 mil kilómetros, grabando sonidos, recorriendo el territorio que ocupaban los shelknam; para tratar de ser parte del medio ambiente y entender un poco sobre él, sobre sus sonidos, la meteorología; leyendo las marcas que aparecen y recopilando información”, contó la investigadora francesa, respecto del estudio que viene realizando, y que pasó por distintas etapas desde el año 2013.

Tiene 50 horas de grabación de diferentes sonidos y pudo relacionar “los cantos que grabó Anne Chapman de Lola Kiepja” con los sonidos registrados. Los audios también le sirvieron para entender “la presencia de los sonidos en la mitología, porque hay muchos mitos que describen esos ruidos, cantos y toda la cuestión sonora”.

“A mí me parece que el sonido tiene un efecto más sensible, hay una vibración, una resonancia y es una manera de comprender y sentir el territorio. Son como firmas sonoras, es una parte de la identidad del territorio. Les resonancias, el eco, el silencio total; eso fui a buscar entre el musgo y la turba”, relató Lauriane Lemasson.

El tipo de trabajo que se encuentra realizando tiene antecedentes en zonas urbanas, pero no en esta región elegida por la profesional francesa. Dice que se decidió por el extremo sur de la Patagonia por referencias que tuvo de la zona durante su época de estudiante, plateándose concretar el desafío después de un duro accidente automovilístico que la llevó a sentir la necesidad de realizar ese sueño.

El proyecto de investigación que lleva adelante fue seleccionado entre muchos otros por la Universidad de La Sorbona, para ser implementado durante tres años. En su recorrido marcó más de 3 mil puntos diferentes en el territorio, descubriendo lugares y sonidos.

“Se trata de comprender una cultura, no solo desde su dimensión arqueológica”, remarcó. Ahora se plantea la tarea de recopilar todo el material para su tesis, comprometiéndose luego a publicar el trabajo para que sea conocido. Los interesados pueden acceder al proyecto y tomar contacto con Lauriane Lamasson en la página www.karukinka.eu

Investigadora francesa realiza importante trabajo sobre pueblos originarios

Reclamo de Margarita Vargas, descendiente kawésqar: “Estamos vivos y somos sujetos de derecho en esta sociedad”

Familia directa de Margarita Molinari, reconocida kawésqar de Puerto Edén, denuncia no haber sido consultados antes de distribuir material con los cantos de su abuela.

través de un programa de televisión que transmitía el canal de la Universidad de Magallanes (Umag), Margarita Vargas Molinari y su familia se enteraron de que unos investigadores de la Universidad de Chile habían producido y editado, a través de un Fondo de Desarrollo Artístico (Fondart), un material audiovisual con los cantos y diálogos de sus ancestros, para ser distribuidos por la dirección regional del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA).

Se trata de composiciones hechas por su abuela y su abuelo para ella y sus hermanos, un  tesoro familiar que “pertenece a su privacidad, la cual fue vulnerada -según expresa Margarita Vargas- ya que ni siquiera nos pidieron permiso a nosotros, su descendencia directa, para hacerlo”.

Los registros datan del año 1971 y fueron hechos por la antropóloga de la Universidad de Chile, María Ester Grede, quien falleció en 2012. Cabe señalar que en la época que la doctora recogió el material, no existían normas o regulación alguna que estableciera la forma en que los investigadores debían aproximarse a la cultura de los pueblos originarios y a sus integrantes, que fueron tratados en muchas ocasiones como verdaderos “objetos”, no respetando su intimidad.

Por aquel entonces, la doctora Grede contaba con la confianza de la familia de Margarita Molinari y habitualmente pasaba bastante tiempo con ellos, grabándolos cuando cantaban o contaban cuentos. Ella se llevó esos registros a Santiago, pero jamás los editó. Tras su fallecimiento, este material quedó archivado en alguna biblioteca de la Universidad de Chile.

En el año 2008, Mauricio Pineda, quien fue alumno de la antropóloga Grede, comenzó a trabajar con el material de la familia kawésqar que su mentora había guardado. En el 2014, Pineda junto a su grupo de investigadores “Etnomedia” se adjudicaron recursos a través de un Fondart con el fin de editar el material para luego entregárselo a las comunidades indígenas de Magallanes.

Así fue que los CD llegaron a las manos de José Tonko Paterito, otro reconocido kawésqar promotor de su cultura, quien, pese a ser de la etnia, no tiene conexión alguna con el tronco familiar de Margarita Vargas, la nieta de Margarita Molinari.

Finalmente, José Tonko Paterito recibió el trabajo y se lo entregó a la dirección regional del CNCA, para que lo distribuyeran entre las distintas comunidades de la zona.

Grosso modo, esa es la historia que llevó a Margarita Vargas a solicitarle al encargado de pueblos originarios de la dirección de Cultura Regional, Blas Flores, para detener la distribución del material.

“Ante la solicitud de Margatira Vargas, nosotros decidimos detener la distribución  del material hasta que se estudie el tema de los derechos de autor. Si ella decidiera implantar alguna medida judicial al respecto, eso involucraría al investigador que creó el proyecto y no a Cultura”, explicó el director regional de la CNCA, Gonzalo Bascuñán.

Además indicó que este proyecto fue adjudicado en el año 2014, tiempo en que aún no era obligación solicitar el permiso de la familia o comunidad en estudio para difundir algún aspecto de su cultura.

Por su parte, Mauricio Pineda dijo estar sorprendido ante esta reacción, ya que normalmente los reclamos de las comunidades indígenas son a la inversa: “A nosotros es primera vez que nos toca un caso de esta índole, ya que los reclamos de las comunidades tenían que ver con que estos materiales circulaban exclusivamente en el ámbito académico y ellos no tenían acceso a éstos. Entonces, el propósito de nuestro proyecto es justamente restituir socialmente estos materiales a la comunidad”.

Y reconoce, por otra parte, que éste es un tema delicado porque se enfrentan a la sensibilidad de las personas. “Por eso, bajo ninguna circunstancia nos interesa pasar a llevar a la señora Vargas, pero también creemos que el valor principal de los materiales se adquiere cuado éstos pueden retornar al grupo cultural kawésqar en su conjunto”, comentó.

Emotivo homenaje entregó la Universidad de Magallanes a Tesoro Humano Vivo del Pueblo yagán

Como parte de sus actividades de aniversario, la Universidad de Magallanes, entregó un merecido reconocimiento a la última hablante del idioma yagán, Cristina Calderón. Fotografía Luisa Villablanca

 

En el marco del  53° Aniversario de la Universidad de Magallanes (UMAG), la casa regional de altos estudios rindió este jueves, un merecido homenaje a Cristina Calderón, Tesoro Humano Vivo del pueblo yagán,  depositaria de la cultura canoera del extremo sur de Chile.

La ceremonia se llevó a cabo en el Instituto de la Patagonia, y estuvo encabezada por el rector de la UMAG, Juan Oyarzo, acompañado del intendente de Magallanes y Antártica Chilena, Jorge Flies.

La máxima autoridad regional felicitó a la universidad por el “merecido homenaje” otorgado a

Cristina Calderón. “Esto es lo que tenemos que hacer como comunidad cuando tenemos a la abuela Cristina entre nosotros. Estamos muy contentos de que haya venido junto a su hija y pudiera recibir el cariño de nuestra comunidad. Todos los reconocimientos que podamos otorgarle son pocos para quien ha sido declarado Tesoro Humano Vivo”, señaló el intendente Flies.

El jefe del Gobierno Regional,consideró un verdadero regalo haber tenido la posibilidad de escuchar a la abuela hablando en su idioma. En este sentido, y ante la preguntra sobre qué se está haciendo por el rescate de la lengua yagán, Flies anunció que ya comenzó las conversaciones para solicitar al destacado linguista Oscar Aguilera, el mismo que realizó un gran trabajo con la lengua kawésqar, reunirse con Calderon para llevar adelante una tarea similar en beneficio del resguardo de la lengua indígena.

Por su parte, el rector de la UMAG, Juan Oyarzo, se mostró muy emocionado al término de la ceremonia. “Estoy muy emocionado por tener que dirigir unas palabras a la abuela Cristina en esta tarde”, dijo Oyarzo y agregó que “es bueno hacer estos homenajes en vida, pero también tenemos que tener algún sentimiento de culpa, donde en alguna época, la gente no midió las consecuencias de las cosas que se hacían con las personas pertenecientes a esta etnia y hoy vemos esos efectos; una etnia y una lengua a punto de desaparecer”.

“Me llena de emoción, porque aunque sea tarde, nosotros como universidad hemos logrado hacer este homenaje, sobre todo porque somos una universidad inclusiva que pretende llegar a todas las localidades como Puerto Williams, Puerto Natales o Porvenir, lugares donde también tenemos centros universitarios”, comentó el rector y anunció además que prestarán todo su apoyo como universidad a una nieta de la abuela Cristina quien, de acuerdo a la propia homenajeada, tendría intenciones de estudiar Pedagogía en Educación Parvularia.

Las autoridades se comprometieron a seguir gestionando la posibilidad de que Cristina Calderón pueda enseñar su lengua y así preservar y difundir parte de su cultura con el resto de la comunidad magallánica.

Source : Prensa Antartica Chilena (https://prensaantartica.wordpress.com/2014/10/24/emotivo-homenaje-entrego-la-universidad-de-magallanes-a-tesoro-humano-vivo-del-pueblo-yagan/)