El misterioso hallazgo arqueológico en Tolhuin: el Municipio no explicó que encontraron (InfoTDF, 19/2/2024)

En el camino al Cerro Michi, un equipo de arqueología del GIATMA de CADIC-CONICET hizo un descubrimiento significativo: durante el trabajo de campo se encontraron materiales y un nuevo sitio arqueológico donde ya se encuentran trabajando los profesionales.

Este descubrimiento se realizó en el marco del proyecto ImpaCT.AR, desafío 2, «Patrimonio Cultural Arqueológico en Tolhuin», respaldado por el Municipio y acompañado desde la primera gestión de Daniel Harrington, y tiene como objetivo principal la identificación y protección del patrimonio cultural arqueológico en la región.

El equipo de investigadores realizó trabajos de campo, que incluyeron prospecciones y excavaciones dentro del ejido urbano de Tolhuin, con la meta de confeccionar un mapa de riesgo arqueológico que permita zonificar áreas sensibles, proporcionando a las autoridades municipales información crucial para el cuidado y la preservación del patrimonio arqueológico en el desarrollo de proyectos de infraestructura.

El proyecto ImpaCT.AR no solo se centra en la identificación de sitios arqueológicos, sino también en la capacitación del personal que trabaja directa o indirectamente en modificaciones del paisaje urbano. Los trabajadores reciben formación sobre la importancia del patrimonio arqueológico y la necesidad de ser cautelosos durante actividades que impliquen movimientos de suelo.

El hallazgo en el Camino al Cerro Michi se suma a descubrimientos anteriores en diferentes ubicaciones de Tolhuin, como el Camino al muelle, Laguna Varela, la bajada del Lago Fagnano y la urbanización de Laderas del Kamuk. La estrategia central de este trabajo articulado entre el CADIC-CONICET y el Municipio de Tolhuin es la prevención, garantizando que las obras y avances de infraestructura se realicen de manera cuidadosa y respetuosa con el patrimonio compartido por la comunidad.

qué es un hallago arquelogico 

Según la Guía para la Formulación del Protocolo de Hallazgos Fortuitos de Patrimonio Arqueológico y Arqueología Pública, un hallazgo arqueológico Es el encuentro imprevisto de materiales arqueológicos tales como vasijas o fragmentos de ella, líticos (piedras o rocas), huesos de animales o humanos, figurinas, utensilios de madera o metálicos, o cualquier otro elemento arqueo- lógico (antiguo). En este sentido, se esperaba que el Municipio de Tolhuin informe que tipo de materiales fueron hallados, para contextualizar la noticia, sin embargo la comunidad deberá esperar un próximo informe para enterarse. 

F:CT

Fuente: https://infotdf.com/tolhuin/el-misterioso-hallazgo-arqueologico-en-tolhuin-el-municipio-no-explico-que-encontraron/

Marca de nombre yagan reabre debate sobre apropiación cultural y patrimonio indígena (El Desconcierto, 8/10/2021)

Por: María del Mar Parra | Publicado: 08.10.2021

Marca de nombre yagan reabre debate sobre apropiación cultural y patrimonio indígenaMarca Yahgan Seafoods /

El uso del nombre yagan por una marca de venta de productos del mar despertó molestia en la comunidad Yagán de bahía de Mejillones, que lucha por concientizar sobre buenas prácticas de protección y aproximación a su cultura.

El nombre yagan utilizado como marca para vender un filete de salmón fue la imagen que comenzó el debate. Por un lado, una pequeña empresa chilena francesa busca “homenajear a un pueblo originario admirable”. Por otro, una comunidad yagan lucha por concientizar a la población y autoridades nacionales sobre el respeto en el uso del patrimonio cultural de su pueblo.

“No somos un pueblo extinto como dicen algunos libros de historia. Somos un pueblo vivo y activo, estamos aquí en el territorio y si usan nuestro nombre y cultura están hablando de nosotros entonces el primer paso es que antes de hacerlo se acerquen a la comunidad y nos pregunten. Pero si nos van a asociar con un producto que simboliza una industria que ha utilizado nuestro territorio como zona de sacrificio, eso indigna”, resume María Luisa Muñoz, representante de la comunidad indígena yagan de Bahía de Mejillones. 

Desde la PYME Yahgan Seafoods se expresa la apertura a dialogar sobre el tema con la comunidad, y aclaran que su empresa no es una salmonera sino un taller que le da valor agregado a materia prima de origen marino. “En nuestro portafolio siempre ha estado la inquietud de trabajar con la más amplia gama de materias primas marinas. Sin embargo, la tendencia de nuestros clientes y del mercado nacional nos inclinó hacia los productos desarrollados a partir del salmón”; señalan.

“Desde la empresa se acercaron a través de un correo electrónico y estamos viendo qué responder. Cuando ya se usa el nombre y ya está la marca registrada, ¿qué se hace? Son situaciones que ya están establecidas, entonces es difícil entrar a dialogar en este punto y con una empresa relacionada a un rubro que es tan nefasto para nosotros”, explica María Luisa. 

Buenas prácticas para proteger la cultura yagan

Tal como comenta María Luisa, no es la primera vez que su comunidad se enfrenta a situaciones de este tipo. “La cervecería austral tiene una cerveza Yagan y en la caja está la foto de una bisabuela de una de las familias de aquí. Hace un tiempo apareció en Buenos Aires un puzle que era la cara de una artesana de la comunidad. La fundación Omora tiene un parque etnobotánico donde los nombres de la vegetación están en nuestra lengua pero tú ahí no vas a encontrar a nadie de la comunidad yagan trabajando como guía, por ejemplo”, enumera.

Motivados por estas situaciones, desde la comunidad elaboraron un protocolo de buenas prácticas para la protección del patrimonio cultural indígena yagan. El protocolo ha sido difundido junto a la Subdirección Nacional de Pueblos Indígenas. “Buscamos la concientización de actores públicos y privados y para eso elaboramos este protocolo. Somos la única comunidad del país que tiene un protocolo, hemos trabajado mucho en él y ha servido para que otras comunidades realicen cosas similares”, comenta María Luisa.

Para la representante yagan, el problema se da a nivel nacional y de las autoridades. “El  mismo Estado a través de iniciativas de Corfo y Prochile o el instituto de propiedad industrial, inscriben estos nombres sin cuestionamientos ni protocolo y es súper fácil inscribir un nombre y eso queda ahí para siempre si lo puedes pagar. Nosotros como comunidad tuvimos inscrito el nombre yagan y lo perdimos porque no podíamos seguir pagando, y enseguida lo tomó otra empresa. Visibilizar esas situaciones y generar protocolos y difundirlos es parte de lo que hacemos como comunidad”; sostiene. 

El objetivo final no es cerrar la puerta sino que se generen mejores prácticas de aproximación hacia su cultura. “A nivel local mucha gente tiene pequeños emprendimientos y envían una carta para pedir la utilización del nombre. Nosotros vemos que es un emprendimiento de alguien que vive en la zona o que tiene un respeto hacia la comunidad y no tenemos inconveniente en dar nuestra aprobación, pero eso lo hacen muy pocas personas”, concluye María Luisa. 

Salmones sustentables 

El punto de mayor desencuentro en la situación de la empresa Yahgan Seafoods se da por la asociación del nombre yagan para comercializar productos derivados del salmón. “Sólo trabajamos con empresas proveedoras que cuentan con pisciculturas certificadas. Apoyamos el cambio relevante en la industria salmonera de manera de hacerla sustentable, apoyando la revolución que se opera en este sector con el desarrollo de crianza de salmón 100% en tierra, reciclando agua y usando residuos como abono natural para agricultura”, señalan desde la empresa en un comunicado.

Pero esta aclaración no tranquiliza a la comunidad. “Nosotros hemos luchado de forma incansable contra la industria salmonera que tiene efectos devastadores en nuestro territorio ancestral. Lo que tenemos claro es que las leyes chilenas en relación al medio ambiente no son garantía de que se va a cuidar nada. Este tipo de actividad, aunque sea en tierra, para nosotros no condice con nuestra cultura y no cuida el entorno. Hemos visto a las salmoneras mentir, ocultar informes y presagiar buenas prácticas. No nos pueden pedir que confiemos”, analiza María Luisa. 

Además del protocolo, la comunidad yagan de bahía de Mejillones está trabajando para recuperar la práctica de la navegación, la alimentación tradicional, el territorio y la lengua. Entre esos esfuerzos, ven como clave el hecho de poder decidir sobre su territorio, a partir de la declaración de un Espacio Costero Marino de Pueblos Originarios (ECMPO); instrumento que reconoce y permite conservar los usos ancestrales en espacios marítimos. 

https://www.eldesconcierto.cl/bienes-comunes/2021/10/08/marca-de-nombre-yagan-reabre-debate-sobre-apropiacion-cultural-y-patrimonio-indigena.html